jueves, 25 de marzo de 2010

resumen de marzo

Iba a pedir perdón por pasar tanto tiempo sin escribir pero no creo que haya quien lea esto con tanta devoción que mi ausencia por un par de semanas le cause algún disgusto.
Tampoco creo que nadie llore si me voy otras dos semanas como muy posiblemente suceda.

Cosas que han sucedido y que probablemente no sean interesantes:

-Compré un pollito en una convivencia para mi hija. Lo cuidamos muchísimo; se murió a los dos días.
-Yo y otras dos personas salimos de imprevisto en la radio leyendo cuentos que escribimos en 10 minutos antes del programa. Muy divertido, regresé la siguiente semana pero ya no hubo suerte.
-Me invitaron a visitar una playa muy popular a la que nunca he ido. Algo hice muy bien en mi vida, no tengo idea de qué.
-He visto tantos capítulos de "No sabía que estaba embarazada" que me ocasioné un leve embarazo histérico. Se que es una tontería pero luego pienso demasiado y empiezo a sentir hasta pataditas. El poder de la mente! Creo que esta es la única vez que se puede estar un poquito embarazada
-Mi abuela me amenazó seriamente con sacarme a jalones de oreja de su cuarto si me sorprendía brincando en su cama. Se que me veo joven pero...
-Ya tengo mi lugar apartado para entrar a la escuela de nuevo. Espero con ansias locas sentir los nervios del primer día y encontrarme con que mi salón esta lleno de adolescentes con pantalones pegaditos. En realidad no se que clase de gente se mete a estudiar traducción. En mi sueños los mesa-bancos están ocupados por nerds amigables.

-Creo que casi cada dos meses tengo un capricho que me obsesiona pero luego se queda olvidado cuando me doy cuenta de lo estúpido que era. Esta vez quiero que alguien me enseñe música. Leer música básicamente... me atormentan esas cinco rayas con sus puntos negros como ojitos diabólicos.


Nos vemos pronto. Aquí les encargo el changarro porque yo me largo.

martes, 9 de marzo de 2010

El mutilador de San José

Ya había comentado antes que me parece que sueño cosas demasiado extrañas. Al mismo tiempo creo que hay mucha gente más alucinante; sin embargo yo sí tengo la suerte de recordar casi todo al momento de despertar.

Hace poco me puse a analizar cuantas historias he escrito que tienen aunque sea una imagen de un sueño, y llegué a la conclusión de que en realidad no tengo tanta imaginación sino un subconsciente hiperactivo.

Darme cuenta de esto significa que cada historia podría esconder algún fragmento de mí que quizás pueda ser interpretado con facilidad por otras personas. Asunto del cual ilusamente pensaba estar exenta.

Hace unos meses soñé con algo que podría hacer una buena imagen para alguna historia, pero no le dado nada de tiempo en realidad. Más que nada porque después de analizarla brevemente creo que su significado es muy obvio para mí. Así que la dejo libre por si alguien quiere apropiarse de este pedacito de mi cerebro.

Por alguna razón nos mudamos a una casita usada en un barrio bastante empinado. El lugar es lindo y me agradan los vecinos, lo cual es muy importante dado que todas las casas están casi pegadas. Me doy cuenta entonces que estoy en San José, Costa Rica.

Apenas estamos acomodando las cosas cuando los vecinos empiezan a salir de sus casas y a hacer un alboroto. Alguien había encontrado una caja de cartón frente a su puerta y al abrirla encontró un pie humano, cortado limpiamente y drenado. Debo decir que parecía un trabajo muy bien hecho.

Algunos vecinos comentan que ya habían visto uno igual, todos comparten sus historias y ahí es cuando me entero de que hacía apenas unas semanas gente de todo el país había comenzado a encontrar pies mutilados en lugares poco comunes.

Era tal la cantidad de pies que la policía estaba pidiéndole a la gente que los entregaran ellos mismos pues no podían ir a todos los lugares donde aparecían. Incluso estaban dando una recompensa de algunos pocos colones por pie.

Justo me entero de esto cuando veo llegar a unos niños jalando un pequeño vagón rojo lleno de pies. Andaban recolectando desde temprano para llevarlos a la policía y ganarse algo de dinero

Los vecinos le entregan el pie como si fuera cualquier cosa y se quedan ahí afuera en sus pórticos para seguir platicando. El mutilador, dicen, no tenía tan mala fama. Le daba a la gente algo que hacer. Cuando llegaron los primeros pies la policía estaba desconcertada pues ningún pie hacía par con el otro. Las personas mutiladas amanecían un día con algún pie faltante sin saber cómo había ocurrido.

Siempre sólo un pie y generalmente el izquierdo.

domingo, 7 de marzo de 2010

Operación hormiga.

El habito de descanso común entre hormigas obreras consiste en dormir alrededor de 4 horas diarias... divididas en más de 250 siestas de aproximadamente 1 minuto cada una.

Yo no podría posiblemente hacer eso, pero por ser fin de semana vale la pena intentar el experimento. Tomando en cuenta que estoy despierta desde el sábado a las 8:30 y que salí con amigos por la madrugada.

Antes de irme me tomé una siesta de 20 minutos, al regresar dormí otras dos horas y espero en el día poder escaparme en lapsos para dormir.

Esto podría tener repercusiones variadas como: cansancio continuo, irritabilidad, locura y súper-poderes de hormiga.

No puedo esperar!

Hasta el momento sólo tengo mucho sueño; pero quién sabe, quizás haya encontrado el método perfecto de productividad para mí. No es que sea algo productivo sentarme a escribir aquí, pero tampoco estoy sentada mirando fijamente al vacío (como probablemente lo esté dentro de unas horas).

Modo hormiga: ON

viernes, 5 de marzo de 2010

Mal momento.

Aquí les va una historia tipo cadena de e-mail:

Te encuentras a una pareja de ancianos en la calle, sin zapatos, llorando porque tienen hambre. Supongamos que te cuentan como los golpearon y les han robado todo. Tú con los ojos llorosos te apiadas de ellos; les regalas comida, ropa, dinero.

Luego te sientes muy bien. Como que hiciste algo muy bueno, la obra del siglo; te has ganado el cielo.

Sigues caminando.

Te encuentras a una niña apenas una cuadra más adelante, también descalza y con hambre. Llora porque acaba de perderlo todo en un incendio y se ha quedado sola.

Tú miras tus bolsillos y están casi vacíos, así que lo sientes mucho. La niña ha tenido mala suerte demasiado tarde. Te consuelas a ti mismo pensando que ella es joven y fuerte, no como aquellos viejitos.

La dejas ahí. Seguro que alguien más se ocupará de ella. Sigues caminando.

...

A las 3:34 am, un terremoto de 8.8 grados sacudió a Chile el 27 de Febrero de 2010 a poco más de un mes de la similar catástrofe en Haití. Las replicas (alrededor de 50) que le siguieron en las próximas horas tuvieron una magnitud promedio de 6 grados. En las siguientes semanas nivel del mar aumentó causando inundaciones en varios pueblos costeros.

La ayuda llega pero lenta; fue un mal momento para tener mala suerte.