Aquí les va una historia tipo cadena de e-mail:
Te encuentras a una pareja de ancianos en la calle, sin zapatos, llorando porque tienen hambre. Supongamos que te cuentan como los golpearon y les han robado todo. Tú con los ojos llorosos te apiadas de ellos; les regalas comida, ropa, dinero.
Luego te sientes muy bien. Como que hiciste algo muy bueno, la obra del siglo; te has ganado el cielo.
Sigues caminando.
Te encuentras a una niña apenas una cuadra más adelante, también descalza y con hambre. Llora porque acaba de perderlo todo en un incendio y se ha quedado sola.
Tú miras tus bolsillos y están casi vacíos, así que lo sientes mucho. La niña ha tenido mala suerte demasiado tarde. Te consuelas a ti mismo pensando que ella es joven y fuerte, no como aquellos viejitos.
La dejas ahí. Seguro que alguien más se ocupará de ella. Sigues caminando.
...
A las 3:34 am, un terremoto de 8.8 grados sacudió a Chile el 27 de Febrero de 2010 a poco más de un mes de la similar catástrofe en Haití. Las replicas (alrededor de 50) que le siguieron en las próximas horas tuvieron una magnitud promedio de 6 grados. En las siguientes semanas nivel del mar aumentó causando inundaciones en varios pueblos costeros.
La ayuda llega pero lenta; fue un mal momento para tener mala suerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario